No quería saber

/

                No quería saber. No quería. Decían que el mar era un mito arraigado, la eterna pregunta enunciada en un soplo; no el

Underground

//

Si el vaso no está limpio, lo que en él derrames se corromperá. Horacio (s. I a.C.)   No hablo de sexo, por más que se parezca.   Hablo de

Límite

//

Algunos días merecen delimitarse por el conocimiento de desfallecer; a pesar de haber sido una estación perecedera la que nos mostró que lo invisible borra toda faz o línea de

Puntos de vista

/

Desde cierto punto de vista, se los podía considerar parecidos. Los dos tenían veintitrés años, y eran altos, fuertes y de tez morena. También cabría contar entre las semejanzas el

Sed

  Esta sed de madrugada que retuerzo como un beso tal vez sea una vasta opulencia,  tal vez. La vida en auge, soliviantada, desfiguradamente estética marca un ritmo monocorde en

Siempre serás mi princesa

              Trono de cartón bajo palio, deshecho por la noche anterior, mullido por las sábanas de tus caricias, al arrullo de tu nana y

Abriendo juego (4)

/

              #10 #11 #12 Vicente Gutiérrez (Santander, 1977) es el autor de La tiza envenenada. Co-educar en tiempos de colapso (Textos (in)surgentes, 2016), libro recientemente publicado y

Abriendo juego (3)

/

            #7 #8 #9   Vicente Gutiérrez (Santander, 1977) es el autor de La tiza envenenada. Co-educar en tiempos de colapso (Textos (in)surgentes, 2016), libro recientemente

Pocas cosas han cambiado

/

  Pocas cosas han cambiado. Por alusiones diré que el sabor férreo de la culpa se repite a determinadas horas, entregado a empapar lengua y memoria. Es el mismo sabor

1 4 5 6 7 8 10