Cuando el viento sopla las hormigas se guarecenen hebras de alfiler. Vuelan hojas con su peso pluma. Las flores de azafrán que esconden oro rojo viven su
Y se hizo el silencio para el cansado caminante. Ruta muerta de pueblos fantasma en ellos sólo hablan las piedras y quién sabe si algún espíritu. Ráfagas de misterio,
Encontré en la tapa de un contenedor de basura un libro con la cubierta de piel y con las hojas en blanco. Lo guardé en mi mochila y así recorrí
Lo sabía: en tus ojeras mecánicas podía dormir como un bebé en una cuna gigante.La noche mostraba,goteando el flujo sobrantede los planetas Venus y Marte, su comportamiento casquivano.Reptaban plantas carnívorasen mis maltrechas