Es duro ver Andor porque [...] habla de los lazos entre individuos como anestésico, del nacionalismo como consuelo, aunque reconozca su importancia y honre sus legados.
«Una vez, al filo de una lúgubre media noche, mientras débil y cansado, en tristes reflexiones embebido, inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidada ciencia, cabeceando, casi dormido,