Tiempos de atasco

/
                                                       Madrid es una ciudad de más de un millón de cadáveres (según las últimas estadísticas).
Dámaso Alonso

 

Me miran amenazantes

las inmensas torres de ladrillo.

Muestran afiladas ventanas

por sus cuatro costados;

bajo los alféizares,

ruidosos aparatos de aire

gotean la bacteria de las altas fiebres.

 

El cielo de Madrid es hoy una larga pestaña gris.

Es una ciudad de más de un millón de cadáveres

donde los mendigos colman las aceras

 

e interrumpen el estilismo de las grandes avenidas,

amontonando sus vidas delante de teatros y franquicias.

 

Ciertos días, se aplican restricciones de tráfico,

otros tantos, alternos, se acucia la recogida de basuras.

La paz se prohíbe a diario en hogares de extrarradio.

 

Contemplo desde tu ventana un cielo corrompido por mil luces de colores,

cada una pertenece a una multinacional que se anuncia.

Pero no he venido a ahogar mi paz

ni a ser testigo del declive.

Te veo dormir

y, de momento, parece suficiente.

Deja una respuesta

Your email address will not be published.

Ver más

  • Responsable: Amberes Revista Cultural.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a Dinahosting que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional: Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.

Historia anterior

Bosque urbano

Siguiente historia

Concha Crespo Reguero: la literatura como sacrificio

Lo último de

#9

Poema y fotografía de David González.

El primer paso

Pocas épocas habrán aglutinado tantos enemigos para el profesor comprendido como acompañante y guía de los